lunes, 19 de marzo de 2007

Primavera


Lo que más voy a echar de menos de Madrid es el Retiro. Hace un par de semanas empezaron a florecer los almendros y cuando volvemos del trabajo nos gusta pasear entre los árboles para adentrarnos en su perfume y ver el cielo desde sus ramas como en el cuadro de Van Gogh.


Este fin de semana el tiempo ha sido esplendido, hemos tomado el sol y hemos mejorado el color de cara mientras leíamos en los bancos del parterre. Con el buen tiempo cada vez es más complicado encontrar donde sentarse y casi siempre tenemos que compartir banco, me encantaría que los parques de Madrid adoptaran la disposición de bancos de los parques de Viena y así todos podríamos disfrutar por igual del tiempo al aire libre, sin tener que molestar a los de alrededor con nuestras conversaciones o las llamadas telefónicas.

En el Retiro mi lectura continua con los cuentos de Flannery O'Connor, originales , bellos y sugerentes. Y en casa he comenzado a leer "Estambul: Memorias y la Ciudad" de Orhan Pamuk, con quien voy conociendo el sentimiento de amargura que define la ciudad tras la caida del imperio otomano.

De las películas que hemos visto dos me han gustado mucho y la tercera no tanto ('La pasión de Beatrice' de Bertrand Tavernier, un drama sobre la edad media demasiado lento y con mensaje difuso) :

'Hijos de los hombres', una película de Alfonso Cuarón que representa una alegoría sobre nuestra propia realidad, una reflexión apocalíptica de un mundo agotado y yermo , un cuadro desolador de nosotros mismos. Una visión futurista de los problemas que menos atendemos: la inmigración, la esterilidad, las drogas que matan suministradas por el propio estado, el terrorismo, la violencia callejera, la publicidad sin control que crea ídolos de masas y desvía la atención de los verdaderos problemas, la polución, el humo, la basura...
Pero siempre hay esperanza.

'Diamante de sangre'
, de Edward Zwick cuyo tema principal focaliza sobre una de las tantas injusticias cometidas contra el mundo menos favorecido fruto del mundo globalizado donde la hegemonía de la cultura occidental responde a intereses económicos y a una estrategia global de expansión de las transnacionales en su proceso de acumulación de capital, y que está suponiendo una amenaza para la diversidad cultural de la raza humana.


Por cierto estoy haciendo un curso subvencionado por la fundación Telefónica sobre 'Voluntariado de Cooperación y Acción Humanitaria', voy por la mitad y por ahora sin lugar a dudas el tema que más me ha gustado es el del 'Análisis de la realidad. Relaciones Norte-Sur' donde se analiza el efecto demoledor que está suponiendo la globalización:
  • Perdida de la capacidad de regulación del espacio global, donde los estados pierden poder en favor de las transnacionales
  • Aumento de los conflictos de acceso a los recursos
  • Surgimiento de un nuevo dualismo, cada vez hay más Nortes en el interior del Sur y más Sures en el interior del Norte
  • Concentrarión del poder. Las transnacionales controlan el 75% del comercio mundial
  • Aumento de la brecha Norte-Sur en cuanto a las variables de progreso humano
  • Aumento de los movimientos migratorios
Así como el fracaso de los acuerdos internacionales en políticas de ayuda al desarrollo.

Ah! y no nos olvidemos del escándalo de las ventas de armas, el mercado menos transparente de todos y que detrae recursos del Sur. En España, que figura entre los 10 primeros exportadores de armas, esta actividad está oculta bajo la ley de Secretos Oficiales y por tanto no se produce debate público antes o después de autorizarse una exportación, esto ha permitido que incluso haya realizado la venta de material militar con créditos de ayuda al desarrollo (FAD)!!!!

Parece mentira que Telefónica me cuente todo esto....

1 comentario:

Xose Ramos dijo...

Menudo año tenemos... justo todos nos entusiasmamos con esta primavera anticipada, y la semana siguiente tuvimos sorpresa. Nada, la naturaleza sigue mandando.